viernes, 5 de octubre de 2012

El 'lujo' de estudiar en la Universidad

Máster en Economía Internacional bilingüe: de 2.000 a 5.900 euros. Máster en Ciencias Farmacéuticas: de 1.981 a 3.900 euros. 5º de Económicas con alguna asignatura de 4º: de 1.100 a 3.162 euros. 5º de Geológicas, de 1.000 a 2.000 euros. Este curso, estudiar en una universidad pública resulta ostensiblemente más caro que el año pasado.
La reforma impulsada por el ministro de Educación, José Ignacio Wert, ha supuesto un importante incremento de las tasas. En concreto, en las seis universidades públicas madrileñas, los precios han subido una media del 26,6%, según cálculos de la Federación de Usuarios Consumidores Independientes.
Si el año pasado estudiar un grado o licenciatura costaba una media de 900 euros, en el curso 2012-2013 supone 1.140. Eso, en primera convocatoria. Las segundas, terceras y posteriores matrículas llevan una 'penalización', de modo que sólo una asignatura puede costar 900 euros. En el caso de la mayoría de los másteres, el crédito ha pasado de 33 a 65 euros.

Recibo de una matrícula de Hª y Cc. de la Música en la UCM en 1ª convocatoria: 1.422 euros.

Recibo de una matrícula de Hª y Cc. de la Música en la UCM en 1ª convocatoria: 1.422 euros.
Unos incrementos que se producen en el contexto de recortes que ha llevado a las universidades a contar con menos docentes este curso -en Madrid, unos 1.000-, menos recursos y aulas mucho más llenas. Hace dos semanas la Universitat de València iniciaba el curso con grupos con más de 700 alumnos matriculados.

Másteres

Paradójicamente, para Paula Martínez Mediavilla resultó casi 'providencial' que la despidieran. Licenciada en Farmacia, estudiaba un Máster en Ciencias Farmacéuticas mientras trabajaba, con vistas a hacer posteriormente un doctorado en Medicina. "Inicialmente me matriculé sólo de 36 créditos, con idea de hacerlo en dos años. Es lo que hace la mayoría de la gente, para compaginarlo con un empleo".
Cuando la despidieron, decidió matricularse de los 24 restantes, porque además ya "temía lo que iba a pasar". El máster ha pasado de 1.981 a 3.900 euros. Así, si hubiera esperado a este curso, los 792 euros que le costaron esos 24 créditos que le faltaban se habrían convertido en 1.560.
Asociaciones de estudiantes denuncian que este encarecimiento puede supone 'la puntilla' para la investigación en España, ya que para realizar un doctorado es imprescindible tener un máster. "Que una primera convocatoria cueste 3.600 euros lastrará la investigación", afirma Borja Andrino, miembro del Consejo Social de la Universidad.
Además, cada vez es más habitual que para obtener un trabajo se exija contar con un máster. "El grado te aporta un un conocimiento general; el máster te especializa. Cualquier director de recursos humanos te va a exigir un máster", explica Adriana Maldonado. Graduada en ADE, cursa un Máster en Economía Internacional bilingüe en la Autónoma de Madrid. En su caso, ha pasado de 2.000 euros a 5.900.
"Cuando reservé plaza el 9 de julio lo hice a ciegas, sin conocer el coste. Yo calculaba que subiría hasta los 3.000 euros". Hasta finales de agosto no supo que tendría que pagar el doble de lo esperado. Su único objetivo ahora es aprobar todo en primera convocatoria. "No me puedo arriesgar a trabajar y quitarme horas de estudio, y tener que pagar una segunda matrícula el año que viene".

Estudiar o trabajar

La ley estatal establece que los precios de los créditos deberán cubrir entre el 15% y el 25% de los costes en primera matrícula, entre el 30% y el 40% en segunda, entre el 65% y el 76% en tercera, y entre el 90% y el 100% a partir de la cuarta: unos 126 euros. Una forma de "exigir al alumno un mayor rendimiento en el uso de los recursos", explica el Ministerio de Educación.
El problema llega cuando el alumno suspende o no se presenta por circunstancias personales o laborales. Sucede, por ejemplo en las carreras más experimentales. "Tenemos gran cantidad de prácticas, salidas de campo... A veces estás cinco días fuera. Es algo imposible de compaginar con un trabajo. De ahí que la media para hacer la carrera sea de ocho o nueve años", explica Juan Emilio Herranz, en 5º de Geológicas y uno de los mejores estudiantes de su promoción.
En su caso, trabajó durante seis años para ahorrar y poder sufragarse los estudios en Madrid, ya que sus padres, jubilados y discapacitados, apenas tienen recursos. Actualmente sigue trabajando mientras termina la carrera. Sin ninguna asignatura pendiente, la subida de tasas se ha traducido en un incremento de su matrícula de 1.100 a 2.000 euros.

Carreras con alto índice de suspensos

"Yo he suspendido cuatro asignaturas. Puede ser mi culpa, pero dentro de mi carrera es normal", explica Javier Ascunce Azpeitia, estudiante de Matemáticas y Estadística. "Que haya 40 matriculados en una asignatura y aprueben seis no es raro". Este fenómeno es muy habitual en las carreras más complejas, como ingenierías o Matemáticas y Física. Por eso, crece el número de estudiantes que se cambia de grado a otros más sencillos. Ascunce lo ha hecho este año, en parte para evitar la subida de precios. "Sólo esas cuatro asignaturas me habrían costado unos 1.600 euros".
A Víctor Moratinos le ha 'salvado' que el plan de estudios que cursa se está extinguiendo, y, al no tener docencia en determinadas asignaturas, sólo paga el 25% del coste. Si no, los 3.162 euros que ha pagado este año por estudiar 5º y parte de 4º de Económicas habrían sido más de 5.000. "El año pasado, el crédito en cuarta matrícula costaba 21 euros. Ahora, 94,75. Eso supone que, por ejemplo, tener que matricularme en la asignatura de Política Económica, que me la dejé porque estaba trabajando, me saldría por 540 euros".
"Si es necesario subir tasas, que al menos lo hagan gradualmente, y no de un año para otro. De haberlo sabido, mucha gente no se habría matriculado de tantas asignaturas", lamenta.

Becas

Noelia Suárez lleva compaginando estudios y trabajo desde que inició Periodismo. Matricularse de los 51 créditos que le faltan para acabar la carrera le ha costado 1.094 euros, frente a los 834,33 euros que pagó por 66 créditos el curso pasado. "La diferencia es casi mi sueldo mensual", entre 400 y 500 euros por media jornada en una perfumería. En su caso, percibe beca por movilidad y por renta y expediente, y lamenta el endurecimiento de los requisitos para acceder a ayudas. "Para la gente que tenemos que pagarnos la carrera, es difícil tener una nota cada vez mejor, porque tenemos menos tiempo al vernos obligados a trabajar. Tienes que esforzarte el triple que el resto".
"Ligar la política de becas a la excelencia es un error", afirma María Fernández Mellizo-Soto, profesora de Educación de la UCM y experta en economía de la educación. "Las becas son un instrumento de igualdad de oportunidades educativas, cuyo objetivo es que personas con pocos recursos socioeconómicos puedan acceder a la universidad. Es un error exigir a los becarios más requisitos académicos que al resto".

No hay comentarios:

Publicar un comentario